Muchos comercios pueden ir seriamente a la ruina como efecto del
SÍNDROME DE SANSÓN DE LA DRECEHA: porque sus naturalezas es robar y
luego revender. Pero no podrán revender un carajo estos meses, porque
siguen el patrón de DÓLAR TODAY. Por otro lado el músculo del gobierno
no llega ya a los especuladores. Pareciera que el gobierno se declaró en
derrota total frente a la guerra económica.
Con la mayor impudicia
vemos como cada semana aumenta sin medida y sin ningún tipo de control
el cartón de huevos. Un cartón de huevos se come un cuarto del sueldo
mínimo. Ya todos los comercios están anunciando que todos los precios se
dispararán un 30%. ¿Iremos a volver a otro caos económico bestial, con
productos pero sin dinero para poder comprar?
He aquí una noticia que alimenta ese pánico:
Desde mayo hasta el mes de octubre de 2016, la moneda venezolana, el
bolívar, mantuvo un tipo de cambio publicado por el portal DolarToday
que promediaba los Bs. 1.000 por cada dólar. Cinco meses de una
estabilidad ficticia que pareciera haber beneficiado a pocos. Las
noticias demuestran como durante ese período la oposición comandada por
la MUD ganaba terreno en el ámbito de protesta, existía un fuerte rumor
del potencial default de PDVSA y la República, y hasta corría el
comentario que DolarToday.com había
sido adquirido por personeros relacionados al gobierno, y por eso el
tipo de cambio permanecía estable.
Un académico que prefiere permanecer
en el anonimato comentó que “pareciera cierto que un juego especulativo
político financiero se mantiene en pie. Unos factores que deben ser
investigados han manipulado la intervención en el mercado paralelo para
aprovecharse del ambiente de zozobra y el desconocimiento de lo que
sucedería con las obligaciones de pago de PDVSA”.
La ilegalidad de la
publicación del tipo de cambio paralelo permite que el origen y efecto
de su volatilidad sea opaco. Apenas PDVSA anunció que si pagaría sus
vencimientos, y que el canje de su deuda había sido parcialmente
ejecutado, el tipo de cambio paralelo se comportó de manera contraria a
lo que cualquier escuela de economía podía pronosticar. Si el riesgo
país mejora y el país paga su deuda, el tipo de cambio debería
fortalecerse o al menos mantenerse, pero en Venezuela, más bien sucedió
todo lo contrario. Desde la misma fecha del anuncio de PDVSA el dólar
paralelo comenzó un ascenso vertiginoso llegando a casi Bs. 1.800 por
dólar. Una maxidevaluación en apenas 30 días.
La única variable que
podría interpretar este precipicio cambiario es que un factor
desconocido mantuvo una calma adrede de mayo a octubre para beneficiarse
de las fluctuaciones de un mercado de deuda externa y un mercado
cambiario manejado por pocos. Este punto de quiebre cambiario hace que
el venezolano que vive de una economía productiva local se enfrente a
una hiperinflación descabellada que se está comiendo cualquier aumento
de salario o ganancia obtenida en bolívares durante los cinco meses de
calma cambiaria que ahora parece haber sido ficticia. La Agencia
Financiera de Noticias y Bloomberg siguen la pista de operadores
financieros, casi todos ubicados entre Miami y Caracas, expertos en el
tema de deuda y cambio en Venezuela. “Estos operadores siguen
desvalijando al país y saqueando la vida del venezolano” afirma un
profesor titular de la facultad de economía de una reconocida
Universidad en la capital de Venezuela, Caracas.