Los americanos son buenos chicos. Siempre encuentran una buena
solución después de agotar todas las otras alternativas (Winston
Churchill, 1874-1965).
Los esfuerzos de Obama contra el bloqueo no son suficientes, dice Castro.
Los saludos, abrazos, intercambio de piropos, sonrisas y amabilidades que caracterizaron la visita de Barack Obama a La Habana no pueden hacer olvidar los 57 años de agresiones, terrorismo, bioterrorismo, intentos de invasión y asesinato de líderes de la Revolución Cubana, bloqueo económico, financiero y comercial y de tantas sanciones que infligieron no solamente el sufrimiento moral, sicológico y físico a los cubanos sino ocasionaron una pérdida de 117 mil millones de dólares a la economía cubana.
Los saludos, abrazos, intercambio de piropos, sonrisas y amabilidades que caracterizaron la visita de Barack Obama a La Habana no pueden hacer olvidar los 57 años de agresiones, terrorismo, bioterrorismo, intentos de invasión y asesinato de líderes de la Revolución Cubana, bloqueo económico, financiero y comercial y de tantas sanciones que infligieron no solamente el sufrimiento moral, sicológico y físico a los cubanos sino ocasionaron una pérdida de 117 mil millones de dólares a la economía cubana.
Por supuesto, jamás habrá disculpas de Washington por todas las
barbaridades que le causaron a Cuba, incluyendo la muerte de niños por
el dengue inducido por los esbirros internacionales del Gran Patrón,
pues no es costumbre de la nación más poderosa de la Tierra de
disculparse y reconocer sus "errores". La Casa Blanca explicó su
reaproximación a la isla con una simple frase que Barack Obama lanzó el
17 de diciembre de 2014: "EEUU termina con un enfoque obsoleto a Cuba
seguido durante décadas porque falló en avanzar nuestros intereses
nacionales".
Suponer que los 11 presidentes norteamericanos se equivocaron en su
táctica hacia Cuba sería desconocer la realidad. La política
norteamericana desde el presidente Teddy Roosevelt en 1903 se basaba en
la Doctrina del Gran Garrote. Decía Roosevelt que "la mejor manera de
resolver los problemas internacionales es con un garrote. Hable bajito y
siempre traiga usted un gran garrote". La voluntad del pueblo cubano y
la existencia de la Unión Soviética no permitieron a Norteamérica usar
este denominador común de carácter imperialista para doblegar la isla.
Balance negativo
Después de la disolución de la URSS y del campo socialista,
Washington no tuvo tiempo para prestar atención a Cuba pues se dedicó
por completo a convertir a Rusia y a sus ex aliados socialistas en
países subordinados al Wall Street y a las grandes transnacionales.
Después, la Casa Blanca y sus aliados europeos se enfrascaron en la
"guerra permanente en el Medio Oriente". Así Washington descuidó su
"patio trasero' donde se inició una "nueva época" en" Venezuela,
Bolivia, Ecuador donde resurgió el populismo nacionalista al igual que
en Brasil y Argentina al comienzo del Nuevo Milenio". Fue como una
alarma para los "iluminados" norteamericanos tanto neoconservadores como
neoliberales.
Precisamente, desde el 2000 Washington inició sus intentos de hacer
retornar "sus hijos extraviados" a su hogar en el "patio trasero"
norteamericano. Han usado miles de Organizaciones No Gubernamentales
(ONG) a su disposición para corromper las bases populares en aquellos
países, desataron una despiadada guerra mediática contra sus líderes,
lanzaron una diaria campaña de desinformación para confundir a sus
pueblos, promovieron sabotajes, acaparamiento de los productos de
primera necesidad e intentaron "golpes suaves" logrando ciertos éxitos.
Actualmente, según Rafael Correa, pusieron en marcha una nueva
"Operación Cóndor" contra Ecuador, Venezuela y Bolivia.
En este contexto, Cuba socialista seguía siendo una piedra molesta en
el "zapato del Tío Sam" a 150 kilómetros de las costas de Florida, la
piedra que obstaculizaba la tarea de Washington de poner fin a todas las
expresiones del nacionalismo y populismo en América Latina. Entonces
Washington decidió que había llegado la hora de cambiar su táctica hacia
Cuba sin alterar su estrategia principal de poner fin al socialismo
cubano. En vísperas de su viaje el presidente Obama, recalcó varias
veces que EEUU haría todo lo posible para convertir a Cuba en un país
democrático a la manera norteamericana. Es decir, introducir en la isla
al "American Way of Life" seduciendo a su pueblo con la posibilidad de
enriquecimiento individual como lo ha logrado hacer en Rusia.
La economía cubana está cambiando, dice Obama
Para su paseo seductor por La Habana, Obama trajo consigo una
numerosa delegación de empresarios, unos 40 congresistas y por supuesto a
su esposa Michelle, sus dos hijas y su suegra, todos protegidos por
unos 1.200 agentes de diferentes servicios secretos norteamericanos.
Nadie sabe para qué tanta protección en el país con el menor número de
crímenes en el mundo. Sin embargo, para la mentalidad de los líderes de
la Casa Blanca, Cuba sigue siendo "el país que auspicia el terrorismo",
que reprime a su población y que "vive en la esclavitud", según The
Miami Herald. Entonces, la nueva táctica de Norteamérica consiste en la
idea de Obama que "ningún régimen represivo puede moverse hacia un nuevo
camino a menos que tenga una opción de una puerta abierta".
La manera como el presidente Barack Obama deja "abierta esta puerta"
para la mayor de las islas de las Antillas es bastante curiosa. De un
lado anuncia un cierto aflojamiento de las sanciones contra Cuba y
declara que "Vine aquí para dejar los últimos vestigios de la Guerra
Fría en las Américas y extender una mano amiga al pueblo cubano" pero
por otro lado el pasado 15 de marzo anunció nuevas medidas parciales
hacia Cuba. La nueva regulación implica que "cualquier ciudadano
americano puede ir a Cuba siempre y cuando el viajero se involucre en un
programa de tiempo completo de actividades de intercambio educativo
destinados a mejorar el contacto con el pueblo cubano, apoyar la
sociedad civil o promover la independencia del pueblo cubano de las
autoridades del país".
Entonces la agenda principal norteamericana hacia Cuba sigue siendo
la misma de los últimos 57 años. El asesor adjunto de la Seguridad
Nacional de la Casa Blanca, Ben Rhodes, declaró hace poco que "las metas
del gobierno americano son las mismas que las de la oposición cubana",
pero la oposición cubana es creada y financiada por Estados Unidos, cuya
meta es instalar el neoliberalismo en Cuba. También el mismo personaje
declaró que la Bahía de Guantánamo no va a ser devuelta a Cuba. Según el
Tratado Cubano-Estadounidense de 1903, Cuba arrendaba de manera
perpetua la base naval Guantánamo a Estados Unidos que tendría
jurisdicción y control absoluto sobre la zona de 45 kilómetros cuadrados
y, a cambio, "reconocería la soberanía suprema de Cuba sobre la zona".
"El objetivo de EEUU es acabar con la revolución cubana"
Durante los 113 años de este Tratado, Washington, conocido
internacionalmente como el país que hace y deshace los acuerdos según
sus necesidades "nacionales", nunca reconoció la soberanía de Cuba sobre
la zona y recién desde 1960 ha pagado al gobierno cubano 4.085 dólares
al año por la cláusula de "arrendamiento perpetuo". Si tomamos en cuenta
el reconocimiento por el Tratado de 1903 de "la soberanía suprema de
Cuba sobre la Bahía de Guantánamo", entonces Barack Obama no sería el
primer presidente de EEUU después de Calvin Coolidge que haya visitado
Cuba en los últimos 88 años. El territorio cubano en Guantánamo ocupado
por Norteamérica fue visitado por otros dos presidentes estadounidenses:
en 1939 Franklin D. Roosevelt estuvo allí de visita y en 1948 lo hizo
Harry Truman.
Lo que hay que reconocer es que durante los tres días de permanencia
en Cuba, Barack Obama tuvo mucho cuidado en mostrar su rostro y sus
intenciones verdaderas hacia la isla. Como decía Hugo Chávez, existen
dos Obamas: "hay un Obama que ayer hablaba de paz…pero hay otro Obama,
el de la guerra, el de seguir utilizando la fuerza contra nuestros
pueblos". En Cuba todo era el "Obama de la paz" que inclusive trató de
tranquilizar a los 13 disidentes, los llamados representantes de la
"sociedad civil" cubana, a quienes exhortó de tener paciencia porque a
pesar de tener "profundas diferencias con el gobierno cubano, podemos
seguir perfeccionando nuestra política de tal manera que al final el
pueblo cubano sea capaz de vivir en libertad y prosperidad".
El bloqueo contra Cuba tarde o temprano acabará, dice Obama
También en su "discurso histórico" desde el Gran Teatro de La Habana,
donde Calvin Coolidge pronunció su alocución al pueblo cubano en 1928
durante la VI Conferencia Panamericana dando su apoyo a la dictadura de
Gerardo Machado, Barack Obama ofreció a los cubanos "hacer el viaje a un
futuro de esperanza como amigos y como vecinos y como familia". Llamó a
la reconciliación de los cubanos y recalcó el compromiso de
Norteamérica de ayudar a "levantarse a los cubanos de ascendencia
afrocubana", como si los últimos fueran desprotegidos o discriminados en
Cuba, lo que está ocurriendo en EEUU diariamente con los
afroamericanos. También habló de la necesidad de resolver los problemas
cubanos en democracia como se hace en EEUU donde "los trabajadores
pueden organizarse y la gente común tener una voz, la democracia
estadounidense ha dado a nuestra gente la oportunidad de realizar sus
sueños y disfrutar de un alto nivel de vida".
Recibió aplausos de cortesía por su retórica y demagogia respecto a
la democracia y prosperidad de la mayoría de la población norteamericana
como si los cubanos y el mundo entero ignorara la realidad de los 48
millones de estadounidenses que sobreviven gracias a los cupones de
comida. En un reciente artículo de David Brooks "Espejos" publicado en
el periódico La Jornada, su autor ha demostrado que la libertad de
expresión es restringida en Norteamérica, "las elecciones libres" sufren
de "irregularidades", la represión policiaca es diaria, la violencia
cobra cada día 88 víctimas, la detención arbitraria e indefinida de
sospechosos puede durar hasta 14 años, la tortura nunca ha sido
fiscalizada y muchos presos políticos están encarcelados.
Obama y la invasión simbólica
En total se calcula que hay 523 presos políticos en Norteamérica,
según la investigación del periodista Pedro Escalante, destacándose
entre ellos el puertorriqueño Oscar López Rivera, "el preso político más
antiguo en cárcel alguna del planeta, con 34 años cumplidos de su
cadena a 70 años por su ‘conspiración sediciosa' por luchar por la
independencia de Puerto Rico". David Brooks, a su vez, denuncia la
existencia en EEUU de la "población encarcelada más grande del mundo,
con 2.37 millones de presos" y que EEUU es un albergue para los
"terroristas y criminales de guerra, mientras la vigilancia
gubernamental y el espionaje masivo a la ciudadanía se están
incrementando día a día". En amplias regiones del país "no se respeta el
derecho a la sindicalización".
Este es el rostro verdadero de Estados Unidos que Barack Obama trató
de esconder ofreciendo a los cubanos la mentira en vez de la verdad o
simplemente haciendo arreglos cosméticos a la verdadera realidad
norteamericana con qué el presidente está intentando crear ilusiones en
el seno de la sociedad cubana, reconociendo inclusive con una suavidad
de un político habilidoso que no todo sea tan perfecto en Norteamérica
pero el mejoramiento está en marcha. América sigue adelante porque "La
Audacia es la Esperanza".
Ahora le toca al pueblo cubano tomar conclusiones después de escuchar
y ver a Barack Obama. Lo más importante no es lo que ofrece o dice
Obama sino cómo los cubanos interpretaran las alocuciones del líder
norteamericano que durante sus casi ocho años en el poder no ha dado ni
un solo año de paz al planeta. Por mucho que quisiera Washington, ya no
podrá anexionar a Cuba por la fuerza pero de lo que tienen que cuidarse
los cubanos, según Frei Betto, es de una "anexión simbólica" a través de
los medios de comunicación, el consumo, el comercio, la diseminación
lenta de los patrones culturales del "American Way of Life" y un casi
invisible reemplazo del colectivismo por el individualismo. Basta dar un
vistazo a la Rusia de hoy para darse cuenta de este proceso.
Los norteamericanos no tienen por costumbre perder el tiempo e
inclusive la Primera Dama Michelle Obama llevó a cabo una reunión con 10
chicas preuniversitarias en el marco del programa de la Agencia de
Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID, por sus siglas
en inglés) y los Cuerpos de Paz "Dejemos que la Niñas Aprendan" (Let
Girls learn). La USAID es conocida en todo el mundo como una CIA
encubierta y fue declarada organización non grata en Bolivia y en otros
países más. Ahora estará presente en Cuba y seguramente la mayor isla de
las Antillas en un plazo corto estará invadida por las Organizaciones
No Gubernamentales.
Se orientarán antes de todo hacia los 500.000 "cuentapropistas", como
se conocen en la isla a los emprendedores que constituyen el 10 por
ciento de la Población Económicamente Activa (PEA). Ya durante el
encuentro con cuatro representantes de este sector Obama les dijo que
"Estoy aquí para decirles que EEUU quiere ser su socio". Apelarán
también a la clase media que es tradicionalmente la más ambiciosa y la
más quejona en Cuba y a los burócratas estatales que estarán tentados
por los incentivos de la corrupción que implantan a su paso las
transnacionales a medida que penetran el espacio económico de los países
de su interés.
En fin, serán los cubanos que definirán su futuro y la necesidad de
una "Primavera Cubana" o un "Maidán" (en referencia a Ucrania) que
anticipan los medios de comunicación rusos. De todas maneras los isleños
están advertidos por el mismo presidente de la Unión Nacional de
Historiadores de Cuba, Felipe Pérez Cruz que recalcó que "según la
declaración de Obama antes de visitar La Habana, Estados Unidos tiene
todavía la intención de acabar con la Revolución pero ahora lo hará a
través de la ‘política de abrazos'".